Digitalización de la educación y los retos de la academia
Más allá de tratarse de un derecho, la educación es el motor del desarrollo individual y colectivo de las comunidades a nivel mundial, además de uno de los instrumentos claves para reducir los índices de pobreza y contribuir a la estabilidad social. La digitalización de la educación está promoviendo esto.
Esta herramienta permite mejorar las condiciones de vida, aumentar los niveles de empleabilidad de los países, reafirmar la identidad de las sociedades, diversificar los campos de desarrollo y fomentar la innovación en diferentes ámbitos educativos.
Como es sabido, la pandemia del COVID 19 ha causado estragos en la vida de los estudiantes, por los retos que trajo consigo y el impacto que la nueva forma de enseñar dejó en los niños, jóvenes y adultos aprendices.
En este contexto, la neurociencia y aprendizaje adquieren un rol fundamental, ayudando a comprender cómo adaptarse mejor a estos cambios y optimizar el proceso educativo en entornos digitales.
Para hacer frente a este impase, las instituciones educativas empezaron a ofrecer modalidades de educación virtual y a distancia, y aunque hubo dificultades en un comienzo para adaptarse a esta nueva manera de aprender, fue la herramienta más efectiva para lograr la continuidad de la formación académica de grandes y chicos.
Aunque una gran parte de las instituciones educativas ya habían empezado mucho antes a hacer sus primeros pinos en la transformación digital, con la pandemia tuvieron que dedicarse completamente a la virtualidad e invertir recursos económicos para sacar adelante el nuevo proyecto: la digitalización de la educación.
Fue tan evidente esta deficiencia, que el Ministerio de Educación Nacional creó un plan de apadrinamiento para que las universidades con mayor experiencia en la transformación digital intercambiaran experiencias y compartieran sus saberes con las que aún no estaban fortalecidas en esta área.
Además de demostrarse la importancia de la tecnología en la educación, se evidenció que la digitalización del aprendizaje es sinónimo de equidad y calidad, de acuerdo a la necesidad de seguir aprendiendo y fomentando la continuidad de la enseñanza.
Beneficios de la digitalización de la educación
La digitalización de la educación ha facilitado, a su vez, la enseñanza de contenidos a partir de diversas metodologías que se adaptan a necesitades individuales en cualquier área y nivel de estudio.
Uno de los mayores retos que enfrenta la educación virtual actualmente, es lograr que los estudiantes desarrollen habilidades de autoaprendizaje y aprovechen el acompañamiento de sus docentes para lograr el cumplimiento de sus compromisos académicos. Es fundamental el auto compromiso, la dedicación y la disciplina, para que la aplicación de las nuevas tecnologías permitan la creación de experiencias vivenciales, que promuevan el intercambio de conocimiento de calidad en las aulas tecnológicas.
Con el fin de dar un paso más en esta evolución mundial, y enfocar a sus estudiantes a desarrollar elementos claves para la transformación digital educativa, BIU University creó la “Maestría en ciencias en educación virtual con concentración en transformación digital educativa”, donde además de tener la posibilidad de elaborar un plan específico para su institución educativa, podrán aplicar estas estrategias a corto plazo.
Es muy importante abarcar este tipo de procesos desde diferentes áreas, y que mejor que empezar por el modelo de negocio del propio centro educativo del que se hace parte, evaluarlo desde su parte administrativa y académica, revisar sus programas, cursos y su cultura.
BIU busca que sus aprendices finalicen comprendiendo los procesos de transformación en áreas académicas y liderarlos, así como también están interesados en que los estudiantes comprendan las diferencias en los usos de la tecnología en función al objetivo académico y puedan dar respuesta al proceso de transformación administrativa y operativa al finalizar su maestría.
Sin lugar a dudas, la educación virtual ha impactado todos los ámbitos de la sociedad, por lo que el progreso del mercado laboral, el desarrollo de nuevas competencias y de habilidades tecnológicas se están volcando a nuevas habilidades y formas de aprender, transformando así la manera de educar y de aprender.